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“¡BASTA YA! ES HOY EL GRITO DEL ALMA DE ESTE PUEBLO”: PADRE ALBERTO REYES VUELVE A ALZAR SU VOZ CONT

  • Foto del escritor: Will Lukas
    Will Lukas
  • 30 nov 2020
  • 3 Min. de lectura

✍️ Mario Ramírez 📷 La Hora de Cuba

Como parte de sus ya acostumbradas “Crónicas del Noroeste”, esta mañana el sacerdote católico Alberto Reyes publicó la cuarta parte de sus entregas, con una reflexión sobre la situación actual que vive el país, en medio del auge de protestas tras los sucesos del Movimiento San Isidro (MSI). Estructurando el discurso en una serie de preguntas polémicas y acudiendo nuevamente a la ciencia, el sacerdote critica una vez más al régimen cubano con fuertes declaraciones.

Desde el mismo comienzo de la crónica el también graduado de Psicología apunta hacia el sistema imperante en Cuba por más de sesenta años, como el verdadero responsable de los males de la sociedad: “Y entonces pienso, y me doy cuenta de que nada de esto ha sido verdad, y que bajo la bandera del 26 de Julio no habrá un mañana, no hay un horizonte feliz esperándonos, no seremos nunca una sociedad próspera”, señaló, antes de pasar a denunciar la filosofía de ese sistema, como ha hecho en otros escritos: “La utopía marxista es solamente eso, una utopía, en lo que el término significa, algo que “no tiene lugar”, algo que no existe, ni existirá”.

“¿Por qué tiene que existir en mi tierra una sola ideología, un solo partido, una sola línea de pensamiento y acción, cuando el ser humano es, por naturaleza, diferente y plural?”, pregunta el párroco en un decálogo de “por qués” que ponen en tela de juicio cuestiones como la libertad de expresión y de pensamiento, la educación, el respeto a los Derechos Humanos, la diversidad, la emigración o la deficiencia de los salarios de quienes viven o vivieron en la isla. “Yo me pregunto muchas cosas, y tengo la impresión de que también otros se hacen las mismas preguntas, pero en silencio”, y ese silencio lo atribuye el padre Reyes al miedo, a la “indefensión aprendida” de los cubanos.

Esta última terminología es uno de los préstamos que el religioso toma de la ciencia, y se traduce en el fenómeno, evidenciado en Cuba, de que las personas no manifiesten su forma de ser y de pensar, aun cuando las condiciones lo permiten, pues están habituados al miedo. “Nada cambiará mientras estemos dispuestos a vivir en la mentira. Nada será diferente mientras continuemos diciendo lo que no creemos, lo que no pensamos”, sentenció al respecto.

Más adelante exhortó a todos a “dejar de mentir”, a dejar de “ser esclavos” y a atrevernos a solidarizarnos con quienes lo han hecho, poniendo por ejemplo las pequeñas protestas sociales con resultados tangibles como las del grupo animalista contra Zoonosis.

“Estamos cansados, todos estamos cansados, no sólo los llamados “cubanos de a pie”. Todos estamos hartos de esperar sin resultados, porque esta lucha por la supervivencia que es Cuba hoy no es vida para nadie”, dijo el durante años vicerrector del Seminario San Agustín en la ciudad de Camagüey, e incluyó en esta línea reflexiva a la totalidad de los cubanos, desde el obrero hasta la casta dirigente que sufre también esta “supervivencia”.

El padre Alberto Reyes comenzó el mes de noviembre con una crónica que invitaba a cambiar la fórmula de la represión por una fórmula de libertad y amor para todos los cubanos. Recientemente ofreció a este medio declaraciones sobre los sucesos del MSI y la decisión de un grupo de personas a solidarizarse con esa causa. Esta crónica de hoy no podía dejar fuera ese contexto que pone en práctica de algún modo las demandas del sacerdote, quien se ha atrevido a alzar la voz contra la dictadura:

“Mientras escribo estas líneas, mi Cuba arde. Gracias a Dios da la impresión de que poco a poco son más los que desaprenden la indefensión con la que durante 60 años nos han sometido. Y ahora son los muchachos del Movimiento San Isidro los que han decidido decir: “¡Basta ya!” … es hoy el grito del alma de este pueblo”.


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